En mi dilatada vida profesional, no tuve demasiados jefes, me lo perdí, me confieso algo anárquico, difícilmente repito un método, soy disperso, independiente, incluso es posible que mi pasión por el trabajo, me ocultara de la necesaria tutela de un maestro, ahora me doy cuenta de que la tutela de un mentor, hubiera encauzado, aun que fuera a costa de mis errores, un destino probablemente de mayor trascendencia pública , quien sabe, incluso mi admirado Leonardo , tuvo en el Verrochio, la figura de un mentor que sin sostener su talento, le ayudó a explorarlo.
Uno de mis pocos jefes, muy decisivo, porqué me enseño que la bisoñez se corrige con pasión trabajo y sabiduría, me explicó en una frase el origen y el final del significado de:confianza, “·Imagina un jarrón que se rompe, puedes pegar todos los trozos y recomponerlo, pero jamás será el mismo” y algo de eso, está sucediendo a nuestro alrededor y las luchas políticas, la debilidad del poder a la hora de reformar, el estado de ánimo de la gente, incluso el movimiento de los indignados lo único que reflejan, es la historia de un país que no cree, que no confía en nada , ni en nadie y eso es lo peor que nos han robado en los últimos tres años.
Se rompió el “hechizo” del jarrón del bienestar de mentira, se acabaron los créditos, pero no los pisos y el gobierno ha pasado de pagar una renta de 1.500 euros por habitante y aceptar millones de emigrantes, a no saber como sacarse de encima el problema social y deber 13.000 millones de euros a las pobre pymes , profesionales y autónomos, a los que encima les ha cobrado 1.800 millones de ivas, sobre lo que no pagan, y encima se ha cargado el crédito exterior, ha tirado el dinero construyendo aeropuertos inútiles (Le Monde 12-06 pag3 ) vendió “nuestras” reservas de oro a mitad del precio actual, vamos que son “genios de la administración de bienes públicos” y lo peor de todo, es que se han cargado la confianza , que es lo más precioso que tenemos junto con la esperanza, y aguantan su “poltrona” contra viento y marea, porque saben que no la ocuparán en varios años.
¿Cómo no va haber indignados, perplejos, hastíados y sobre todo, indiferentes, la gente de bien y la que vive de su trabajo, no cree en la clase política ¿se enteran? los que se hacen llamr intelectuales, no lo sé, porque ellos viven precisamente de eso, de hacer pronósticos, que casi nunca se cumplen y de anunciar las vigilias después de las fiestas, pero los que nos vestimos por los pies y tenemos un despertador alas 7 de la mañana, algunos antes, sabemos que el mundo se construye con hechos, nunca con palabras, ni parábolas, ni sermones, los docentes sabemos que por muchos masters que impartamos, al final la experiencia de la calle, es la que señala al “maestro”, lo otro sólo es un papel.
Necesitamos un Obama, tanto como que se llenen los hoteles este verano y que haga buen tiempo, porque el turismo es el único recurso fiel, del que también podríamos aprender, porqué entra de lleno, en las razones y la solución de la crisis, ¿Qué de donde vienen estos clientes dispuestos a pagar por un pedazo de sol, un lecho y muchos servicios? Pues de fuera y algunos de dentro y eso es lo que hay que potenciar, vender fuera lo que no vendemos aquí, innovar, copiar, crear y competir en nuevos mercados, sin perder los viejos, puede que así no recompongamos el “jarrón” pero si nos recuperamos , quizás ganemos lo suficiente para comprar otro.