Confieso que siempre me ha gustado la gente que “vibra” que sabe lo que hay que hacer sin ni tener que empujarla, como diría Bendetti, éstos son los verdaderos emprendedores.
La verdad es que no resulta demasiado fácil asumir los tiempos que vivimos, incluso es probable,que tanta tecnología nos haya atontado hasta el punto de llegar a la inmoralidad como filosofia de vida , hemos pasado de la austeridad al desfilfarro , o de la discreción a la impune ostentación, viendo como la “chuleria” de algunas personas que se hacen pasar por empresarios, pasean la amoralidad como precepto de vida, no solo en los juzgados sino en la más tonta de las cajas que se podría llegar a inventar, porque además de atontar al que lo ve, encima le roba su tiempo y le vacía los bolsillos vendiéndole lo que no necesita, para que vean lo perverso que puede ser el marketing.
Nos engañaron con tanta creatividad económica y nos hemos llegado a creer que podemos tomarnos la misma sopa con cucharas del todo a cien y beber cava en vaso de plástico, porque hemos perdido el gusto por las cosas bien hechas ¿como hemos llegado a este punto de ingenuidad?. Nosotros que inventamos el turismo como industria, que nacimos con los valores del trabajo, el esfuerzo, la honestidad . Hoy vivimos prisioneros y estressados por una dichosa maquinilla que llevamos siempre encima y que marca los compases de nuestra vida al ritmo del bluetood,el email y que nos roba el tiempo que necesitamos para respirar, vivir o mirar a la gente a la cara , aunque sólo sea para sonreirle, nos hemos vuelto tan vulnerables que hemos sucumbido al atontamiento que produce la sociedad del bienestar, como si ésto fuera un invento del Padre Estado ignorando que somos nosotros quienes lo alimentamos.
Y a pesar de tantos masters ,nos hemos dejado sorprender y engañar por bancos y empresas de monopoly, como la AIG,Fortis o Fadesa y las que no sabemos , pero todas disfrazadas de la mayor volatibilidad posible y con la impunidad de los políticos, que lástima, que hayamos perdido el gusto por las cosas bien hechas .
No sé como hemos llegado a tanta contaminación en las finanzas y en la confianza de la gente , pues, aunque llegue el septimo de caballería , disfrazado de rescate público y político, el mal ya está hecho.
Creo que por lo menos debemos tener la valentía de delatar y distinguir entre los que edifican una empresa con los meros especuladores , porque los primeros crean riqueza y los otros sólo la mueven para sí mismos, o para reirse de los millones de pymes y trabajadores que creamos el milagro de darle vida a este pais.
Tenemos demasiados farsantes e ínútiles en centros de decisión y así resulta dificil crear nada que valga la pena, espero que la crisis actué de revulsivo tal como pude presenciar y sufrirlo en mis carnes durante las tres anteriores que me han tocado vivir, porque aquí, cualquiera que tuviera un móbil y una furgoneta se ha creído empresario, de la misma forma que uno se cree que es directivo porque ha sacado un par de masters y eso no va así, el talento nunca se compra , sino que se gana igual que el liderazgo, no os podeis imaginar como añoro aquellos líderes empresraiales que tuve la suerte de conocer como Duran Farell,Costafreda,Puig y otros, porque sabían que una empresa no puede dirigirse sin alma, ellos creían en las personas mucho más allá de utilizarlas en beneficio de una organización que proporcionara bien común incluso a ellos mismos.
¿Más cosas?, Hay una plaga y estamos contaminados ¿vale? pero hay buenas noticias porque tenemos la receta, la primera es que vamos a salir de la crisis, sin ninguna duda , porque la gente necesita vivir y mirar hacia adelante, la evolución es endémica al ser humano, hay que comer todos los dias y además nos han enseñado a competir, hemos querido tomar el atajo del poco esfuerzo, pero vamos a repetir curso y saldremos adelante.
Otra cosa más, los bancos necesitan dar créditos, no se apuren , ya que viven de eso, ahora están en la cuarentena de la gripe, porque a algunos se les indigestaron los dineros de plástico y sobre todo los dineros contaminados, no es nada fácil “tragarse” todo esos, pero nos dejarán dinero , que es la forma en que ellos lo ganan.
No sé si cambiaremos los hábitos de consumo, pero sería bueno reflexionar sobre eso, y no sólo es cuestión de prohibir las contaminantes bolsas de plástico, sino de evitar que se llenen de tanta “xorrada”ede importación que compramos , naturalmente que debemos consumir y mucho, pero lo conveninete y si es posible de aquí, igual que harán los americanos.
Otra más, sería bueno , empezara disfrutar de hacer las cosas bien, leáse, tener criterio, aunque para eso haya que estudir un poco, pero leer más y algo de cultura ayuda a decidir, de esta forma no nos “entramparemos” en proyectos empresariales que dejamos a medias, con la consiguiente frustación, aprendamos a elegir y habrá menos fracaso escolar, estudiemos conocimientos y habilidades que nos vayan a pagar fuera y si nos hacenmos funcionarios, lo haremos mejor, porque el patrón somos todos, sin dejar de aprender siempre , hasta a encontrar pareja y así evitaremos que el 44 % de los matrimonios se convierta en fracaso.
La última, seamos capaces entre todos de crear una economía decente , apoyada en los columnas claves, una buena metodología y las personas, organizndose de forma de que cada uno haga bien lo que sabe hacer y no otra cosa y apoyada en los valores de siempre, ésto es, el esfuerzo individual, la perseverancia, la exigencia,la tolerancia y sobre todo una buena comunicacióbn, no es posible ser un buen lider si no podemos transformar a las personas.